miércoles, febrero 21, 2007

Ciudadano X


-¿Trae asté una identificación con foto?...mmm, esta no sirve. Una que sea nacional.
-¿Se llama usted fulanito equis, nacido el equis día de tal año en la ciudad equis?
-¿Esta asté seguro? Es que no aparece en el padrón y si no aparece es que alguno de sus datos están mal o es que nunca se ha registrado.
-Oiga, se va a tener que quitar los aretes. No puede traer aretes ni lentes ni nada de eso.
-Es que yo se la tomo así, pero como es federal si luego no le llega pos no se sorprenda. Así son las reglas.
-¿Seguro que por esa calle vive?, ¿está seguro que existe, tiene testigos? No estoy segura si un fantasma con aretes en la ceja aplica para votante...
-No, un ciudadano es un ciudadano, pero en la foto tiene que salir un ciudadano sin aretes. Si fuera asté ciudadana ahí si no le digo nada, hasta con tupé puede salir.

Mire señoloquesea (seño con labios delinados con negro y labial rosita nacarado, seño con fleco cahuamero y sudadera inefable, seño con pantalones de chaparreras incluídas y chicle como segunda lengua, seño con uñas acrílicas una sí la otra no, seño con mechas, seño con muchas etcéteras), uno no deja de ser ciudadano por tener la ceja perforada, ni siquiera por se miope, uno mientras tenga huella digital y algo arriba del cuello es material para que usted haga su trabajo.
Si fuera por mi, no me preocuparía demasiado por estar en ese padrón de mierda y engrosar una lista de justificaciones para una institución que se inventó a si misma una cualidad democrática lejos de aspirar, la misma que quedó evidenciada en su ineptitud acomodaticia de lujo las elecciones pasadas.
Aún si quisiera quitarme los aretes no puedo, están atorados y si hay alguien allá donde quiera que hagan el casting poblacional que dice que yo no merezco estar en el padrón me sentiré aliviado de tener demasiado estilo como para tomarme el tiempo que puedo utilizar en un facial, llenando su boletita ridícula. Seré el primer asilado político por hacer del sense of fashion una forma de desobediencia civil.
No entiendo por que no estoy en el padrón, pero tampoco he resentido en ningún momento mi condición de outsider involuntario (al menos no tengo useful vote hangover). Me empadroné siendo adolescente y la credencial, si mal no recuerdo, la perdí en el cuarto oscuro de un bar, pero me gané un cultivo de ladillas que combinarían muy bien con la orzuela de su cabello y así homenajearía mi adiós al retro-nasty-overrated sex con gente anónima cuyos olores quisiera olvidar.
Eso sí, espero que mi credencial haya cumplido su labor altruísta de hacer todas las rayas de coca posible para hacer explotar el resto de millones de neuronas de algún ciudadano votante del Yunque hasta que le quede la nariz como a la Campuzano o la Jackson.
Amén.

-Casi ni se notan los aretes. Firme aquí y ponga su dedo pulgar aquí y luego acá….

Chingue a su madre asté y la democracia, yo sólo quiero cambiar un cheque.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Le hubieras hecho la camaleonina¡¡

La fran.

Manuel dijo...

No se cual es esa, pero soy muy flexible (...)

Anónimo dijo...

Mmmmmmmhhhh... ¿piercing en la ceja y mucha flexibilidad? si ya dejaste ese hobbie raro del cultivo de ladillas yo sí te incluyo en mi casting poblacional y te empadrono cuando quieras.

Manuel dijo...

Las ladillas son como una especie de rito de iniciación mundana. El que esté libre de ese pecado que tire la primera mentira.