viernes, noviembre 30, 2007

diatriba del NO

No cabe duda que lo mejor que pudo pasarle a Julieta Venegas fue que el público de su edad le volteara la espalda, porque tuvo la oportunidad de calar hondo en una audiencia en trámite de fortalecer sus prejuicios (no sólo musicales), que es de lo que se trata la juventud.

En ese sentido, no sé si alguna vez fui joven, porque prejuicios yo los he tenido todos desde hace mucho tiempo. Muchos les llaman filtro social, otros amargura, otros ni saben como nombrar nada pero aprendieron -como uno- a definir su personalidad balbuceando sus primeras palabras encarnadas en un contundente y -en ese entonces simpático-“no” en pañales.

Antes de ponerle mayúsculas, uno ya ejercitaba el arte de la negativa:
no me gusta el deporte, no me gustan las matemáticas,
no me gusta ir a misa,
notedoylasnalgas.almenosnoaeseprecio.
notequiero.nomeparece.nomequedo.nomevoy.
nomevengo.nolohago.nonomegusta.nomelostrago.
asíno.nomedalagana.notelameto.nomemeto.nomehace.
nomepone.no…no…no…¡NO!

Así deberían aprender los artistas a decir que NO a las mesas redondas, zapatero a sus zapatos, Martha Chapa a sus manzanas, Frida a sus listones, Gabo a su prosa peregrina y senil, Fuentes a sus auras, Velasco a sus malos chistes creyéndose literatura, Volpi a sus huesos-crack y así pues: todos felices y contentos hasta que tire la primera piedra el inconforme, a quien no le llega el hueso, el que no sabe pintar manzanas y le apena ponerse listones y dejarse crecer la ceja, el que no tiene prosa de gancho ni punto de cruz, el que no se ríe ni de sus propios chistes, el que ha hecho del rencor su único combustible y es a lo único lo que no ha sabido decir NO.

jueves, noviembre 29, 2007

Impunidad, celebridades y patrias

He de confesar que el chiste de ser mexicano en una feria internacional es que uno cuenta con algo que es muy valioso: la impunidad. La padeció sobre todo una autora británica, toda etérea y pelirroja ella, estrenando estatus de celebridad con su primer libro (The Thirteenth Tale, algo así como Henry James meeting Emily Brontë, but less borring an as enterteining as a best seller should be) y esperando quince minutos a ser entrevistada por este remedo de periodista que juego a ser. También la volvió a padecer Lydia Cacho (que ya debe estar acostumbrada, hay que decirlo) cuando mi bocota no pudo evitar insinuarle que su detención fue lo mejor que le pudo haber pasado a su carrera editorial.

Hay chalecos de celebridad para todos los gustos y medidas: ahí está el recién premiado Antonio Ortuño, que pasa casi la mitad de su presentación quejándose (según él de broma, según yo sacando cuentas de cuantos fans podría estar perdiendo) porque no está su nombre en la mesa de presentación de un libro sobre pornografía; ahí está también Nicolás Alvarado erigiéndose como el único fan heterosexual (¡con zapatos verde perico!, le faltó agregar) de Madonna, porque es más importante dejar en claro la orientación sexual que argumentar sobre un guilty pleasure compartido con toda una masa polimorfa y perversa; el coautor del ensayo premiado por Planeta (La ceremonia del porno), Andrés Barba que bien machacadito su discurso y muy pro y muy … guapo, pero tan faltito de perspectiva histórica con que apoyar sus tesis –que aunque divertidas, resultaron débiles- que bastó una buena dosis de Vicente Molina Fox para ubicarlo y sacarlo de guión (en trámite de perdón una vez que la encargada de prensa de su editorial me regale el libro, porque el porno y yo nos amamos).

En una mesa de escritores irlandeses, los ídem se la pasaron diciendo que no se consideran a si mismos escritores irlandeses y que su única patria es la literatura bla bla bla, pero se les llenaba la boca diciendo lo bonito y cálido y rico que es el irish-english hasta que de pronto pasaban del cliché al elogio y a lo mucho que se identifican con los mexicanos que siempre sonríen (¿será porque tenemos mejor dentadura?). La más articulada resultó ser Claire Keegan, que en lugar de parirla parece que la dibujaron, pero Jamie O’Neill dijo algo interesante sobre el nacionalismo; que una vez que la patria deja de ser tu amiga hay que mudarse (los nacionalistas tienen a la patria como su amo).

Anoche fue la fiesta de los periodistas y yo le bailé toda la noche al percusionista del grupo Pernett… ¡Por favor!, que alguien apoye mi moción de alinear de otra manera a los grupos y que se ponga la batería al frente del escenario, al menos cuando se tenga semejante bizcocho.

Posdata: que mal bailan los periodistas, espero que escriban mejor.

lunes, noviembre 26, 2007

a la FILa

Mis personajes de la FIL 2007:
-Leonardo da Jandra, que no lo he leído jamás, pero nomás escucharlo hablar en la presentación de una revista de literatura bilingüe (porque según parece hay mucha curiosidad entre la cultura hispana y la francófona y yo ni enterado) me cayó de perlas su humor rancio y sus máximas de la perfección. En contra de todo menos de si mismo, el chiapaneco con acento gachupino, barrió con los organizadores de la feria a los que calificó de neo fenicios, aseguró que la mayor parte de lo que se publica es una mierda y denostó el culto al éxito y la frivolidad editorial. Sus razones las ignoro, pero aplaudo su hocicona verborrea, aunque no comparta del todo su neo-fascista-romántica de closet idea sobre la belleza y la fealdad, como polos opuestos. Lo blanco y lo negro luce muy bien en el vestir, pero pues uno no es pingüino.
-La sala de prensa de la FIL, que es como un cyber café gratuito (con acreditación, claro) tres nice, con bebidas y botanas y teléfonos con líneas abiertas y todo lo que algo del primer mundo puede ofrecer dentro del tercero (creo que ahora entiendo el término neo-fenicio de da Jandra).
-García Márquez, que le trajo un publicazo a su paisano Álvaro Mutis (el homenajeado), con quien tiene pacto de no elogiarse en público mutuamente (el elogio y el silencio tienen tantas caras como el odio). El gentío no paraba de aplaudir, el ex presidente Betancur y la ministra de cultura de Colombia (que bien podría pasar por cantante tropical) hicieron evidente que ellos no tienen pactos anti-laudas, y supongo que también hizo lo suyo Jorge Volpi, pero pa’que les echo mentiras si me fui a dar una vuelta por los stands para que se me cayera la baba con todo lo que no puedo comprar.
-Estuve a punto de comprar la edición conmemorativa de la revista BUTT (tan letrado yo pues), pero al llegar a la caja, la etiqueta que decía 269 resultó ser de 629 así que les dije métanselo por el ídem (sale más barata en línea, helou, Taschen!).
-La editorial Siruela y todo lo Colofón debería ser decomisado por ese asalto en despoblado que son sus precios. La impunidad es endémica en este mundo del dog.
-Hay una editorial queer que se presenta por primera vez en la feria, tengo pendiente echar un vistazo para tumbarme el rollo y no irme con la idea que sólo tienen versiones echas a medida de lo ya perpetrado por Jazmín y Cartland. Algo habrá de tomarse en cuenta.
-El mesero del hotel me ha preguntado en el desayuno si vengo de Colombia. Yo lo tomo como un elogio, pero dudo que mi acento sono-tijuanense próximo a guacho tenga algo que ver con el cálido y amable de la tierra de Fernando Vallejo.
-Con penita (y por encargo, claro) subí a que Carlos Fuentes me autobiografiara una baratísima edición de Aura. Una vez ante él le dije que yo hubiera preferido llevarle a firmar Cantar de Ciegos, pero lo perdí en un taxi de Tijuana -por caliente. Eso último creo que no necesitaba saberlo a sus 79 años (el canon te pone la piel estirada y rosada o venía llegando directo del peeling?).
-Mi hermana me dijo que me tomara fotos. Yo no soy de esos, le digo. Y es cierto, aunque también ha de contar que no tengo cámara.

jueves, noviembre 22, 2007

Coffee without cigarettes

Atardece, tomo café frente al ángel, un muchacho me vende un chocolate a diez pesos para comprarse un libro de fotografía. No pongo en duda sus razones, a mi me da igual un libro que resistol 5000 -nos caemos bien. Pasa una señora regalando ediciones vespertinas de un periódico que dirige un tal Kawaghi que no me da buena espina con ese apellido. El tema central es la disputa entre los vendedores ambulantes del centro histérico con una lideresa ídem -¿qué pedo con que la cara de la Gordillo se haya vuelto algo viral en la participación política mujeril de este país?

Puede que tenga que ver con el evidente auge de la cirugía estética en la ciudad más poblada del mundo. Si se ostenta semejante título, supongo que hay que echarle ganitas. Y aquí es evidente que sin ganitas no la armas, independientemente del giro de las mismas.

Mi café es del 7 eleven pero igual lo saboreo. No por mucho tiempo, porque llegan dos de esos niños que inspiraron el término más peyorativo que les hayan acuñado jamás: en situación de calle. Pues yo en situación de Valentín Trujillo en su hyper fascista y tremebunda Ratas de la Ciudad. Antes de darme tiempo a ubicar sus rostros y registrar sus pedidos estaba yo con ellos encima pidiendo-exigiendo algo de mi momento Kodak citadino, y antes de intentar ubicarlos en mi espectro cosmopolita progre, me sentí el más provinciano del mundo.

Estoy seguro que de no haber tenido el café y el chocolate pro-libro habría terminando entregándoles la cartera. Porque mi suéter jamás.

martes, noviembre 20, 2007

Epidemia de suicidios

Soy adicto a las despedidas, a los adioses ralentizados, a levantar la mano y agitarla como reina del ejido -ladeada de tanto cempasúchil con claveles en la mano, desequilibrada por la peregrina tarea de usar zapatos años después de su primera comunión.

¿Cuántas comuniones le falta a esta provinciana alma mía, que sobrevalora por pura y simple necedad el cambio y la reinvención; que se aburre a las primeras pero tarda años en convencerse a si mismo –sin mucho éxito- que lo mejor no está en otra parte, lo mejor está adentro? Pero uno siempre busca algo que le combine a ese traje hecho a medida que son los sueños y la simple y pinche curiosidad.

Lo más ingenuo de todo es pensar que uno de verdad se mueve, si estamos montados en una masa calenturienta que toma 365 pinches días pa’mal dar una vuelta de tango.

El caso es que cómo puede uno ser fan de irse y venirse al mismo tiempo, ¿será esto una nueva vertiente de la bipolaridad? Es lo de menos, pero igual se agradecen las carnes asadas en ausencia, las hamburguesas genéricas acompañadas de buenos deseos, las pedas en tugurios que te conocen hasta la sombra, las empanadas argentinas en terrazas con vista al atardecer, las botellas de vino, las cervezas, los besos y abrazos y toda esa materia prima pa’la nostalgia que se niega a llamarse a sí misma cursilería y que ha dado tanto de comer a sabinas y serrates y tristes sucedáneos.

Dicen que el que mucho se despide pocas ganas tiene de… pero déjenme informarles que no es mi caso, me despido mucho porque las ganas yo las administro como se me da la gana.

miércoles, noviembre 14, 2007

...es una aventura -no un carnaval- Celia

******* says:
y cual es el pedo? o sea.. vas a la aventura o tienes algo alla?
Manuel says:
kinda both.
******* says:
de chamba?
******* says:
onde vas a estar?
******* says:
o sea que ahora si voy a tener que leer tu blog para ver que chingados haces alla?
Manuel says:
Jaja. no es obligacion
Manuel says:
tengo varias cosas vistas, pero nada seguro
Manuel says:
voy a quedarme con una amiga
******* says:
ah
Manuel says:
y si pasa mucho tiempo y no encuentro trabajo me voy con mi hermana
Manuel says:
ves?
Manuel says:
el caso es que en lo que encuentro algo quiero probar como me funciona trabajar por mi cuenta
******* says:
de puta?
******* says:
por que no?
******* says:
jajajaja
******* says:
ya se
Manuel says:
se me da
Manuel says:
si pues, estoy hartito de los horarios y eso
Manuel says:
mi plan es...
Manuel says:
IMPROVISAR
Manuel says:
brilliant, isnt?
******* says:
descubrirte a ti mismo?
******* says:
jajajaja
Manuel says:
imaginate que miedo descubrirme a mi mismo?
Manuel says:
seria el peor de los despropositos
******* says:
jajjaaja pues lo de los horarios te doy la razón
******* says:
y pues si ya tenias con quien irte alla, no entiendo como no lo hiciste antes
******* says:
pero si te gusta el defectuoso?
Manuel says:
me encanta, pero vivir alla me da :s
Manuel says:
pero pues ya estando alla tendre que encontrarle el lado
Manuel says:
no me habia ido porque me impone un poco la ciudad y creo que en cierta manera esa es razon suficiente para decidirme
******* says:
que curado
Manuel says:
sera que todo me da igual o que estoy aburridisimo
******* says:
pues si, cambiar aires es buena solución
******* says:
para muchas cosas, je
******* says:
y si no te importa improvisar pues que mejor
Manuel says:
;)
******* says:
ya les dijiste a todos aca?
Manuel says:
desde la semana pasada
Manuel says:
he confiado en que se corra el rumor y a quienes les importa pues me preguntan y los que no ….
******* says:
pos no
******* says:
ja

lunes, noviembre 12, 2007

Gaps

¿Porqué hay tanta gente a quienes les incomoda la felicidad?
¿Porqué será que sólo a través de los demás pueden reafirmar su efímera estabilidad emocional?
¿Es acaso el so called love lo mismo que un traje nuevo que hay que lucir lo suficiente antes que pase de moda?
¿Quién dijo que la felicidad era un momento Kodak con trámite a portada de cuaderno Scribe?

No me crezco con la desgracia ajena ni deliro por su opuesto meloso, pero sí me sorprende la necia inseguridad que se empeñan muchos en agregar a su fórmula romántico-obsesiva.
Cuando los nicks del Messenger de algunos contactos rozan el tu-y-yo-somos-uno-mismo uno no puede sino preguntarse el origen de esa obsesión siamesa, sobre todo teniendo en cuenta que la personalidad propia -la individualidad- no es fácil de lograr y como que no es muy inteligente labrársela a pulso para luego mimetizarla a la primera oportunidad, convirtiéndola en un monstruo de dos cabezas que tarde o temprano terminará autodevorándose.


Quizás nuestra verdadera vocación sea recolectar nuestros pedazos, reconstruirnos como porcelana china, enamorarnos de cada grieta, de cada hueco por el cual respire la herida… la misma a la que nos hemos hecho adictos.

jueves, noviembre 08, 2007

Ice Princess

He's turned back into dust.

I knew him shiny and happy, way too beautiful for this world.
We used to sit next to each other at drawing lessons and spend the whole time talking about everything, movies, books, painters we both like and other random assorted gossip.
He was almost my opposite, he had spent his short life inventing a character for himself that matched his aesthetical obsessions.
While I used to feel like a punk rocker wearing a pair of ripped jeans, he wore a hair band with an ethnic white shirt, collars and silver rings on all his fingers. His eyebrows resembled María Félix and his elegant Oscar Wilde/Quentin Crisp manners were worthy of note.

I kept my distance from his coffin last night, surrounded by flowers and mourning relatives. I hugged his brothers and sisters and sat by myself amazed by some reticent tears… The Ice Princess is melting down.

Ice is supposed to liquefy.

miércoles, noviembre 07, 2007

Ventana

Lo bueno de improvisar es que tienes un margen de error bastante amplio y lo bueno o malo que salga de tomar decisiones azarosas es que cualquier tino sale con cara de gracia y su lado opuesto como mero tropezón.
Lo importante es moverse, que no es para tanto tampoco lo que hay por perder y no hay nada lo suficiente imprescindible como para inmovilizarte por no dejarlo atrás.
El asunto de irse es pura poesía y oportunidad para el chantaje sentimental, uno nunca se va aunque siempre se esté yendo. Uno no se va hasta que no queda de otra y ni secuela alcanzamos, que los ejecutivos de la realidad tienen otras cosas en que ocuparse (auto-boicotearse, por ejemplo) aparte de extenderle a uno el contrato de exclusividad.
Lo peor que puede pasar es que la corriente del río se lo lleve a uno de corbata.
Eso viene mucho… pasa hasta en los edenes.