Una cuarentona greñuda y bocona

"Una vez me preguntaron si no pensaba en resucitarla. Y resucitarla significaría que está muerta”
Joaquín Lavado, “Quino”

Nació el 29 de Septiembre de 1964, en Buenos Aires, Argentina. Se llama Mafalda y se apellida “De Todos”, porque dejó hace mucho tiempo de ser propiedad exclusiva de su autor y del pueblo argentino.
Mafalda es la niña más bocona, contestataria y elocuente que ha dado la cultura popular. Hoy cumple 40 años y no ha cambiado nada. No ha tenido que recurrir al botox o a las cirugías como las figuras populares que llegan a esa edad. Con su actitud es suficiente.
Gracias a la tinta indeleble de su creador, a la magia de las imprentas y de la producción masiva, esta niña argentina y su grupo de inseparables ha aprendido a hablar en muchos idiomas y ha sembrado la semilla de la irreverencia en millones de lectores que nos enamoramos de ella.
Odia la sopa y las injusticias, sin importar el orden porque una es metáfora de la otra, además de ser un trámite obligatorio para el postre. Adora su globo terráqueo pero al que éste representa no lo entiende del todo, a veces hasta le choca.
Desde su barrio clasemediero cuestiona la dinámica mundial con la agudeza que da la inocencia y la impunidad que le brinda la infancia. Sus compañeros son Manolito el avaro, Susanita la romántica reaccionaria, Felipe el angustiado, Libertad la guerrillera, Miguelito el bobo, y Guille, el hermano menor que apenas está en decidirse a hablar castellano.
El mundo de los adultos es un misterio para ellos, sin embargo es el único referente que tienen para entender lo que les rodea y no siempre obtienen las mejores respuestas ni los mejores ejemplos.
Tras diez años de aparición continua en los diarios hispanos, Mafalda pasó a ser de los personajes de papel más famosos y su vida cuadrito a cuadrito es de los compilados impresos de mayor venta en el mundo. Ha pasado de generaciones en generaciones sin perder su esencia combativa.
Decidió no crecer a manera de protesta. Si los niños son el futuro del mundo ella no quiso contaminarse de adultez.
Se ha callado porque ha terminado de hacer sus preguntas y aún no le dan respuestas que la convenzan. Tal vez el día de las respuestas decida responsablemente convertirse en una adolescente o una adulta irresponsable, por pura vocación contestataria.
No hay señales por ahora de que algo así suceda.

Feliz cumpleaños Mafalda. Sigues siendo, a tus cuarenta, la niña de nuestros ojos.