martes, noviembre 01, 2005

Conjugándo-me

Llego a la taquilla del cine y digo sin lubricante de por medio:
-Yo, Puta.
La dependienta me responde con una pregunta:
-¿De las 7:50?
-Sí, contesto con cara del que va a pedir información a Doble-A y ya lo tienen en el atril, con toda la gente de frente esperando escuchar salir del micrófono tu historia desgarradora, el conteo matemático-trágico de todo lo que perdiste por la bebida, de lo mucho que te arrepientes y las tantas veces que has tratado de dejarla sin lograrlo.

Entro a la sala, me chuto el interminable desfile de comerciales y avances de películas, esperando ser sorprendido por una película con un cartel y un trailer pretencioso, a medio camino entre el comercial de condones y el de desodorante.

Odio ser tan suspicaz: la película es más mala que pegarle a la nana y, ciertamente, cualquier comercial de Axe tiene más morbo, mejor estética y es mucho más honesto que este bodrio tímidamente moralista, fashion a huevo, con un tufillo academicista de bostezo y con unas actuaciones (las reales y las ficticias, da lo mismo) malísimas.

Salgo del cine con un carón, voy al baño, meo, me acerco al espejo y me digo a mi mismo:
-Tú: más puta y más interesante...
... y sin tanta luz neón ni lencería barata ni verborrea pseuo-netófila.

¡Obras son amores, bonita! Mejor dedícate a la academia que al cine no le hace falta tu mal gusto. Ya tiene suficiente.

6 comentarios:

Madame X. dijo...

¿Puta? Prácticamente me inventé la palabra yo. El lunes perdí la ropa en una sauna. Tuve que mamársela a tres carcamales para poder utilizar su teléfono, hasta que al final un simpático adolescente colombiano me dejó (previo coito) llamar por su teléfono móvil a mi ex marido. La conversación fue: "Hola, ¿qué tal? Sí, soy yo. Mira, voy a hacerte una petición un tanto insólita: ¿me puedes traer unos pantalones y una camiseta? Es que he perdido la ropa y…" Al final, salí (con mi ropa) y le compré medio kilo de buñuelos de nata al saunero, que fue de lo más gentil. ¿Puta? Pues sí, un poquito.

Manuel dijo...

Pero si no es concurso esto, Querido Tacón. Yo lo único que he perdido en los saunas ha sido la vergüenza y uno que otro kilo.
Lástima que acá en México sean un asco.

No one dijo...

No dejare comentario en este post...

Anónimo dijo...

Amanda Gris se azota por todo....

Anónimo dijo...

... se azota o nunca ha ido a un sauna... don Manuel, le dejé una pregunta en el post anterior...

Mercedes dijo...

Yo ni me he azotado ni he ido a un sauna, tengo bastantes estrias y la demas gente no tiene la culpa.