sábado, abril 23, 2005

Nico

Pinche vieja.
Era bien guapa y tenía una voz de tenor que ya la quisiera Pavarotti en estos momentos.
Anoche, Quiatora Monorriel, se salió de sus sketch minimalistas-coloristas y presentó una coreografía intensa, solemne y poética con dos morras bailando al ritmo de la voz de esta ex-Velvet Underground y chica warholiana.
Yo estaba con que ¿quién es esa vieja que canta tan chingón?
No podía leer el programa porque estaba oscuro y al terminar la coreografía que me dejó con el ojo cuadrado, pude leer el título: Nico, música original: Nico.
Pues sí, es la pinche Nico. La misma que después de ser la yonqui más guapa y decadente de los sesenta-setenta, se regeneró y creo que hasta vegetariana se hizo(!) con tal de reconciliarse con la vida, que le pagó con la muerte más un-cool que alguien como ella podía esperar: un accidente en ¡Una bicicleta!
Ni modo, Nico, Ni-como-ayudarte, perdiste la gran oportunidad de morir glamorosamente de una sobredosis.
Pero lo chingona nadie te lo quita, ni la muerte chiquita.

1 comentario:

Anónimo dijo...

La Nico también fue todo un ejemplo de madre: Indujo a su hijo a la heroina para que se solidarizara con ella en sus adicciones...
Atte
Jota A.