sábado, diciembre 26, 2009
Teléfilo
Y habrá una madre que se tire de los pelos al saber a su retoño en la calle, ignorando seguramente que lo que el chamaco compra es otra clase de dulces y que la guerra que se libra allá afuera es justo para asegurar que ese comercio siga pujante, que la diversión llegue a su destino sin importar lo que se atraviese, aún si se trata de sistema podrido en busca de una redención eternamente anunciada que se niega a reconocerse en el espejo como el enemigo real.
No es gratuito que las granadas caigan en juzgados y comisarías ni que alguien tome de rehén a un Walmart entero con todo y amas de casa desesperadas dentro, agarrandóse el pecho con sus uñas decoradas y ansiosas por haber dejaron el horno encendido. La realidad tiene la mala costumbre de atravesársele a la gente envuelta de absurda imitación de la televisión. Y yo, la neta-la neta, prefiero la tele.
martes, diciembre 22, 2009
Christmas Card
by Etgar Keret
There was this guy who could walk on water. Not that that's such a big deal. Lots of people can walk on water. They usually don't know that because they don't try. They don't try because they don't believe they can do it. In any case, that guy believed, and tried and did it. And that's when the whole mess began.
That guy had an apostle who was very close to him and sold him out. Not that that's such a special thing either. Lots of people are sold out by someone very close to them. If they weren't very close, then it wouldn't really be considered being sold out, would it. Then the Romans came and crucified the guy. Which, also, isn't very unique. The Romans crucified a lot of people. And not just the Romans. Lots of other nations crucified and killed lots of people. All kinds of people. Ones who performed miracles and even ones who didn't. But that guy, three days after they crucified him, was resurrected. And by the way, even that resurrection thing didn't happen here for the first time, or even the last, for that matter. But that guy, people say, that guy died for our sins. A lot of people die for our sins: greed, jealousy, pride, or other, less well-known sins that haven't been around for such a long time. People die like flies because of our sins and no one bothers to even write a Wikipedia entry about them. But they wrote one about that guy. And not just any old entry, but a really big one with lots of pictures and blue-colored links. Not that a Wikipedia entry is such a big thing. There are dogs that have Wikipedia entries about them. Like Lassie. And there are diseases that have entries there, like scarlet fever and multiple sclerosis. But that guy, they say, unlike multiple sclerosis and Lassie, achieved what he achieved through the power of love. Which is something we've also heard before. After all, there were those four English guys with the hair and the beards too, just like him, except that they were a little less famous, and they sang many songs about love. Two of them are already dead, just like him. And they, by the way, have a Wikipedia entry too. But that guy, there was something special about him. He was the son of God. Except that, actually, all of us are God's children, right? We were born in his image. So what the hell was it about that guy that turned him into such a big deal? Such a big deal that so many people throughout history were saved or killed in his name?
Anyhow, every year, around the end of December, half the world celebrates his birthday. In many places, it snows on his birthday and everyone's happy. But even in places where it doesn't snow, people are happy on that day. And all because of what? Because a skinny guy who was born more than two thousand years ago asked us all to live lives of love and morality and was killed because of it. And if that's the happiest thing this weird race has to celebrate, then it deserves a Wikipedia entry too. And actually it's got one. Go to the nearest computer now. Type in "humanity" and you'll get the entry. Short. Very short. Not a lot of pictures. But even so. One whole entry on a fascinating and slightly baffling race. A race that could have walked on water and never tried. A race that could have killed all those who believe the world can be a better place and in most cases, made sure to do just that. So merry Christmas to you too.
Please feel free to reproduce.
Translated by Sondra Silverston
Etgar Keret can be found at www.etgarkeret.com.
Electric Literature can be found at www.electricliterature.com
Mi humilde y flawed traducción
Tarjeta de Navidad
Ese tipo tenía un apóstol que era muy cercano a él y que lo traicionó. No que eso sea algo raro tampoco. Mucha gente es traicionada por alguien cercano a ellos. Si no fuesen cercanos, entonces no sería considerada traición, ¿verdad? Luego llegaron los Romanos y lo crucificaron. Lo cual tampoco es raro. Los Romanos crucificaron a mucha gente. Y no solo ellos. Muchas otras naciones crucificaron y mataron a mucha gente. Toda clase de gente. A quienes hacían milagros y hasta a quienes no. Pero este tipo, tres días después de crucificado, resucitó. Y ni eso de la resurrección -por cierto- era la primera vez que pasaba, ni siquiera la última si a esas vamos. Pero según la gente, él murió por nuestros pecados. Mucha gente muere por nuestros pecados: avaricia, envidia, orgullo o algún otro pecado menos conocido que no ha existido por mucho tiempo. Cae gente como moscas a causa de nuestros pecados y nadie se molesta siquiera en escribir una nota en Wikipedia por ellos. Pero escribieron una acerca de ese tipo. Y no sólo una vieja nota sino una enorme con muchas imágenes e hipervínculos azules. No que una nota en Wikipedia sea tampoco gran cosa. Hay hasta perros que tienen notas en Wikipedia. Como Lassie. Y hay enfermedades que tienen notas ahí, como la fiebre escarlata y la esclerosis múltiple. Pero él -dicen- a diferencia de la esclerosis y Lassie, logró lo que logró con el poder del amor. Lo cual es algo que también hemos escuchado antes. Después de todo, existieron esos cuatro tipos ingleses con el pelo largo y las barbas, justo como él, salvo que ellos fueron un poco menos famosos y cantaron muchas canciones acerca del amor. Dos de ellos están ya muertos, como él. Y ellos, por cierto, también tienen una nota en Wikipedia. Pero aquel tipo tenía algo especial. Era hijo de Dios. Excepto que -de hecho- todos somos hijos de dios, ¿no? Fuimos creados a su imagen y semejanza. Entonces ¿qué demonios convirtió a ese tipo en la gran cosa? Tanto que mucha gente a través de la historia fue salvada o asesinada en su nombre.
De cualquier manera, cada año, al final de Diciembre, la mitad del mundo celebra su cumpleaños. En muchos lugares nieva ese día y todos se ponen felices. Pero incluso en los lugares que no nieva, la gente es feliz ese día. Y todo ¿por qué? Porque un tipo flacucho que nació hace más de dos mil años nos pidió a todos vivir de acuerdo al amor y la moral y fue asesinado por eso. Y si eso es el suceso más dichoso que esta raza extraña tiene para celebrar, merece una nota en Wikipedia también. De hecho, tiene una: ve a la computadora más cercana, teclea “humanidad” y llegarás a la nota. Corta… muy corta. Sin muchas imágenes. Pero aún así. Una sola entrada para una fascinante y ligeramente desconcertante especie. Una especie que pudo caminar sobre el agua y nunca lo intentó. Una especie que pudo haber matado a todo aquel que creyó que el mundo podía ser un lugar mejor y la mayoría de las veces se aseguró de hacerlo. Así que Feliz Navidad a ti también.
sábado, diciembre 12, 2009
Sabbath...
I finally said it: El 2009 fue infernal, me urge que termine para ver si acaba conmigo o yo con él. Es mi mayor propósito para fin de año, tragarme 12 ribotril en lugar de uvas y despertar en la mañana con el hocico lleno de arena –si sigo vivo- o volando –si no- por encima de este país de mierda preparando un desahogo intestinal que será mi legado al mundo de los vivos. Si pudiera elegir los objetivos sería mucho mejor, pero como nos creemos aún una democracia representativa pues there you have: my opinion in a simbolic last crap. ¡Cómete ésta Lance Armstrong!
Pues siguiendo con las anal-ogías nunca me había sentido tan crappy como en este año que se va. Y la verdad creo que cualquier ciudadano conciente coincidiría conmigo en ese sentimiento tan poco popular pero tan sigilosamente expandido a lo largo de nuestra geografía. Tampoco es de extrañar ese comentario si has pasado por este blog más de una vez, pero la verdad todo esto ha sido un desafío a mi temple y mi apego por la estética, elementos indivisibles en mi estilo de vida. Y hay que reconocerlo, quien no es pesimista en estos tiempos es un irresponsable que debería hacerse panista, pejista o sus sucedáneos.
Y no me refiero sólo a la depresión de los mercados bursátiles internacionales y a los índices históricos de desempleo (otra estadística internacional a la que me uno) sino a la necia cruzada que nuestro presidente insiste en perpetuar contra quienes mantienen a flote nuestra triste y maquiavélica economía. Quien no haya entendido que el narcotráfico no es el enemigo, de plano que se regrese a estudiar turismo. Y quien piense que porque no esnifa una raya no contribuye al enriquecimiento de los giros negros espero les hayan alcanzado las rodillas para pedirle perdón a la Guadalupana, precursora del mulismo mistico kitsch. C’mon, esa virgencita fue nuestro primer Malverde!
Yo no sé que vaya a ser de este país, que quiere identificar a sus ciudadanos con la más alta tecnología cuando la mitad está malnutrida y en el hoyo. Si lo que quieren saber es el nombre de pila de los capos del narco, escuchen los corridos ¡por el amor de Freud! La neta para tanta superficialidad deberíamos postular para presidenta a Lolita Ayala o Lucerito. Al menos habría un poco de congruencia (anti)estética.
Ya no sé si contarles que al menos este año descubrí mi sazón como cocinero porque no soy de los que dan dos cachetadas y una caricia. O una cosa o la otra, el equilibrio dejémoslo al Cirque de Soleil que ya sabrán ellos qué hacer con él. Voy por mis pastas…
miércoles, noviembre 25, 2009
Juegos de manos
Seguro para el Sr. Presidente esto nada tiene que ver con el incidente en la inmortalizada estación del Metro Balderas hace algunos meses, ni con la tasa de desempleo o la oportuna ola especulativa de grandes y medianas empresas buscando sacar petróleo de la necesidad ajena. No. Para el, la mitad de su gestión es un heroico ejemplo de cómo sortear las impredecibles crisis económicas, políticas y sanitarias tan solo desinfectándose las manos. Lavárselas es tan 2008! Una sola-solución para tres grandes lastres nacionales. De aquí al premio Nobel, mi Gelipito… Obama será tan 2009!
Eso sí, la película tiene un gran mérito aparte de su republicana hipocresía: no es cualquier cosa hacer un ladrillote de un mito tan atractivo como es el vampirismo. Gracias a Dior tenemos a Allan Ball y su True Blood, que no deja de ser kitsch, pero al menos tiene harto sexo y sangre a borbotones, lo mínimo que un fan del género exigiría.
miércoles, noviembre 18, 2009
Zzzzzorry
Podríamos especular con que Los abrazos rotos maneja un tema que le elude particularmente o que ha intentado deshojarlo -sin tino- de toda obviedad para favorecer a la forma, como pasó -con apenas mejor fortuna- en La mala educación, pero es una pena para quienes esperábamos algo a la altura de la menos ambiciosa pero mucho más congruente Volver, con una Penélope Cruz a años luz de esta Lena nacota y desabrida (una especie de Lucia Mendez ibérica, aunque sin la bis cómica involuntaria) con la que cuesta trabajo sentir empatía o siquiera interés. Lo mismo va para el personaje que encarna Luis Homar, un guionista ciego buscando venganza sin perder su cachondez, una especie de alter ego sublimado cuyo rictus trágico y espíritu decadente lo hace tan antipático como al director obsesionado con su niñez en La mala educación o aquel acosado por un Antonio Banderas en plan fan-fatal.
De las formas ya sabemos, encuadres imposibles, ambientación un poco menos chillante a la acostumbrada, con detallismos inútiles, énfasis como vibrato de Alejandro Sanz creyendose cantaor (aunque en realidad nadie canta o hace playback esta vez, como si ese fuese su unico elemento kitsch) y lo peor, una Blanca Portillo creyéndose Meryl Streep con paño…
Podría seguir, pero la neta -la neta- me da harta flojera.
martes, noviembre 03, 2009
Inglorious Bastard
Pero enfrentarse de cara a la violencia en una ciudad como ésta, en pleno transporte público y a hora pico es harina de otro costal. Yo podré ser muy osado (al menos de lengua) pero al DF y las vías del metro y sus habitantes yo los respeto tanto como a mujer despechada con puñal en mano. Pero resulta que el respeto no siempre es recíproco y ahí es donde toca sacar el entrenamiento callejero que alguien de mis ínfulas debe tener: cuando alguien te detiene antes de subir la escalera y no te suelta a pesar de las tres advertencias de rigor no queda más que aplicar la de tirar el expresso-americano aún caliente que sostiene la mano derecha y lanzar el puñetazo mas épico del que seas capaz, esperar solo el tiempo suficiente para ver hasta donde fue a dar el susodicho y calcular que no se levante inmediatamente y te lo devuelva. Después toca acomodarte chaqueta y boina (el estilo morirá con uno) y seguir tu camino mirando siempre por el rabillo del ojo por si vienen tras de ti por la revancha o por un autógrafo, el cual hay que negar siempre con una sonrisa, porque nunca sabes de donde va a salir una cámara en Youtubeland.
domingo, octubre 25, 2009
Silence can be a headline
Me enternece. Ahora encuentro muchas más cosas que me enternecen frente al televisor que fuera de él, pero eso es matemática pura: estos meses he pasado mucho más tiempo viendo televisión que en cualquier otra época de mi vida. Y trato de convencerme que no es tan malo pero en el proceso empiezo a sentir una especie de vértigo, casi el mismo que me da al leer TvyNovelas en la fila del supermercado y que he llegado a sentir pisando la línea amarilla de algún andén del metro.
Y resulta todo un cliché pensar en esta ciudad como en una prisión, pero resulta que la verdadera prisión es justo el lugar común. Y es tan difícil huir de eso que a veces me palpo el cráneo buscando el chip y solo logro desprender la caspa de entretiempo, que tan mal se lleva con mi guardarropa de invierno.
Y sí, esperaba la felicidad para postear de nuevo, pero esa empresa estaba tomando demasiado tiempo y mis dedos no discriminan estados de ánimo. Y dudo ser capaz de reconocerla si se me atraviesa por la calle, toca a mi puerta o me esposa a una celda fría y gris con vista panorámica a la nada.
miércoles, septiembre 30, 2009
domingo, septiembre 20, 2009
True Blood
Río, pero no sé si llamarlo felicidad.
miércoles, septiembre 09, 2009
Arrugas
Y no, mi madre no tuvo nunca vocación de mártir, no se me confundan, pero eso no significa que no haya padecido lo que muchas mujeres de su generación. Me cuenta que fue bautizada clandestinamente en plena resaca cristera, que mi abuelo a quien quería para mujer no era mi abuela sino a una de sus hermanas, pero se la negaron (con lo que me carcajeo yo de la Esquivel y su “Como agua para Chocolate”) y literalmente le tocó bailar con la mas fea, a la cual traía de andariega, maltratada, mal alimentada, golpeada y embarazada en ese orden. Ella vio las golpizas que le daban hasta que un día mi tío (el único varón) fue lo suficientemente grande para detener al abuelo en una escena que hubiera sido la delicia de Shakespeare o ya de perdida del Indio Fernández.
La idea de que ese machismo romantizado en las películas de mediados del siglo pasado correspondiera tanto a la realidad mexicana no hace sino erizarme la piel. Saber que nuestro presente este tan ligado a tantas atrocidades y que uno de por sentadas tantas cosas que apenas unas cuantas generaciones atrás eran impensables me sorprende tanto como la fortaleza y la actitud de mi madre, que así como esconde una historia terrible en cada arruga también ha sabido poner las cosas a su favor. Algo habrá que aprenderle (tachemos drinking and cursing).
domingo, septiembre 06, 2009
Ginger
jueves, agosto 27, 2009
Infulas
Tómat'ésta, Manú Chao,Welcome to La Verga...
Tener ínfulas de esa magnitud tiene su precio, y no estoy hablando yo de detractores o complejos de culpa mesiánicos sino de atravesarse entre karmas de densidades casi metálicas, como el de esta ciudad cada vez más afeada pero tan negada a los acicalamientos inútiles como a los elogios hipócritas. Desdentada y amnésica al tiempo que clavada en un pasado donde no es que fuera bonita sino que nadie se atrevía a decirle fea de tan popular que era en la tropa mi Adelita: no fuera a ser que cerrara las piernas abiertas que siempre ha tenido al turismo nacional y extranjero, o le negara un privadito tanto al soldado raso como al alcalde en turno o un meneo de tetas en la nariz a la trailera escupe-dólares o el guiño de ojo a la jotita trasnochada ofreciéndole algún peroxido de importación clandestina, como si a la Tía Juana le hiciera falta ser rubia pa’divertirse.
Esa cara de adicta sin remedio a la meta anfetamina ya se la había visto yo antes de irme. Y cada vez que la visitaba trataba de fijarme en su fleco acicalado y en su actitud ocultando el rengueo. Pasaba por alto las ojeras y pensaba que eso y los pómulos marcados eran culpa de una mala iluminación pues after all lo más cercano a la Dietrich que conoce esta ciudad es Angélica Chaín, que al menos tuvo la suerte que el sector empresarial la sacara de trabajar (en caso que doméstica de lujo sea algo aspiracional ). Pero cuando el cutis empezó a resquebrajársele y su dentadura a desaparecer como piano de la II Guerra me dije a mi mismo que era tiempo de decirle:
–¡Morra, túmbate el rollo! Nunca fuiste bonita, pero al menos eras más interesante que un ladrón con pistola de juguete asaltando desempleados en un taxi colectivo (no traía tanto dinero pero casi pierdo las ganas de fiesta tenkiu very much!) o que un ñoro asoleado ofreciendo papelitos y robando focos de los patios de las casas. ¿Dónde quedó el tiempo en que eras el epicentro de lo cool, donde en tu nombre se daban tantas becas (muchas de ellas inmerecidas pero eso es irrelevante aunque cierto) y el mundo te veía hacia arriba? ¿Qué paso con aquella morra de edad indefinida, sazona, de ceja bien delineada al hablar español y bien arqueada al saltar al inglés con la facilidad de una intérprete de la ONU menos mustia, esa que se meneaba por el mundo entaconada, con un aire de grandeza tan heroico de tan injustificado? Yo no sé qué te pasa, pero te veo mal, demasiado perdida, como rindiéndote al acorralamiento y enamorándote del cliché. Tú que a todos decías que sí pero nunca cuando, que veías por encima del hombro tanto al gringo como al migrante, que distinguías la denominación de un billete por su olor. Ahora tienes todos los sentidos atrofiados por tanta chingadera que te metes y te meten, como mujer de un narco de poca monta resignada a ver como sus carnes se desparraman por el sillón mientras ves las telenovelas de Telemundo comiendo Cheetos Flaming Hot y embarrándolos en el respaldo nomás pa’star a tono con la decoración del SEMEFO. ¡Chale!
lunes, agosto 17, 2009
Zeus (2)
domingo, agosto 16, 2009
Zeus (I)
PS: Sorry Madonna, pero apenas me voy acordando de tu cumple. Eso te pasa por no tener cuenta en Facebook. Happy lo hayas tenido, Girrrrl!
miércoles, agosto 12, 2009
Timing
"Lo único que sé es que si uno ama una ciudad y pasea por ella lo suficiente, años después el cuerpo, y no sólo el espíritu, reconoce de tal manera sus calles que en un momento de amargura sazonado por la nieve que cae melancólicamente vuestras piernas son capaces de llevaros por sí solas a la cumbre de una colina querida". (pag. 22 de Me llamo Rojo, de O. Pamuk)
Estoy seguro que lo único que no me encontraré aquí será alguna calle nevada, lo demás segurito.
jueves, agosto 06, 2009
Sinuqué?
Hoy la crisis se agudizó tanto que tuve que ir de farmacia en farmacia comparando precios de medicamentos hasta darme cuenta que las apariencias engañan. Los lugares que menos esperas te dan los mejores precios. Si, los mismos que te fuerzan a comprar todo orgánico como si cada sateluco fuera una Gwynet fucking Paltrow, también tienen los mejores precios farmacéuticos de la zona (unas por otras I guess). Lo peor no fue la desembolsada ni el peregrinaje etno-trágico-musical sino que al llegar a casa a tiempo para Project Runway! me entero que uno de los medicamentos es inyectable tenkiu very much! Y ni siquiera intravenoso para más glamour o rectal para más diversión sino intra-fucking-muscular: aplausos! Y encuéntrenme a esa hora una farmacia o clínica que aplique inyecciones sin una receta firmada o al menos el recibo de compra que asegure que mi dinero se fue a sus arcas (ni siquiera tuve la delicadeza de grabar mi consulta telefónica).
Pues ahí me tienen googleando la mejor manera de auto inocularse uno by myself. Nomás faltaba que vinieran a alburearme! casi me dijo Mr. Google, pero ya que croleaba pa'bajo me encontré con las reglas básicas de la utoinyeccionalización. Y ahí me tienen en el baño con los pantalones abajo, frente al espejo, como posando para Manhunt, con el delineador de mi hermana dividiendo mi nalga derecha en cuatro, como pa'jugar al gato: Inicio mi juego dibujando un círculo en la parte superior derecha y saco la jeringa de su envoltorio y dudo si leyendo en voz alta las instrucciones pueda aguantarme la risa de verme en semejante postura niurkezca, pero aprovecho ese pensamiento malagüero (cada vez que retumbe ese nombre en mi cabeza, escupiré) para agarrar desprevenido al glúteo en cuestión y aplicar un líquido caliente que en el momento no dolió nadita, pero que ahora me tiene al borde del sillón, en un sentado que me envidiaría cualquier debutante serreña.
Si en los días venideros no posteo nada será porque apliqué el Simi-Harakiri. Es decir, el autoaniquilamiento accidental a lo Mishima con sentido del humor… porque qué le queda a uno cuando escasea el talento?
sábado, agosto 01, 2009
Huída
viernes, julio 24, 2009
Ban Marriage
Independientemente de lo condescendiente de toda esta alharaca Prop8 en Estados Unidos, que piensa que redefinir una figura legal en nombre de la democracia significa acabar con la homofobia, o que ponerle apellido a un crimen cometido contra un miembro de una minoría racial o sexual sirve para algo más que para fines estadísticos, lo que más me llama la atención del activismo gay gringo es esa arrogancia clasista a la hora de exigirle a su presidente - empeñado, por cierto, en comportarse como celebridad y no como funcionario público- que reorganice sus agendas y priorice en sus políticas a favor de un sector de la sociedad al que le urge el papelito del registro civil para sentirse ciudadanos de primera. Y que de paso les de chance a aquellos militares atormentados por el Don't Ask, Don't Tell (que equivale al mexicano que no te cache tu superior, a menos que te esté cachando tu superior) que usen cinturones D&G (Hello!, Bruno dixit) y bungalows decorados con velas aromáticas en Afganistán, porque ya de por sí la guerra es estresante pues al menos un jacuzzi colectivo para matar el tiempo entre bombardeos (Queer Eye for The Stressed Out Army). Y todo esto con el argumento rebatible y cansón del así nacimos: el gen de la inocencia y el culo de la impaciencia elevado a mantra exculpatorio, como si en realidad ese fuera el punto.
Cuando deberíamos levantar la voz por el derecho a la diferencia, exigimos una igualdad de postín, una estrellita en la frente por bien portados, como en el kinder. Amancebados por adelantado con el supuesto enemigo sin reconocer nunca que dicha obsesión acarrea el gen de la propia intolerancia, el bouquet perfecto de la boda de sus sueños, la oportunidad de levantar el dedo para señalar al otro, al que no, a ese que un día se fue y del que hay que alejarse porque para eso existen las categorías, para pintar una línea y no dejar pasar a quien afee el retrato.
La ventaja de vivir en México, gobernados por panistas que piensan que están haciendo un favor a la sociedad poniéndola en fuego cruzado ante las mafias diversas, peleándose ambas el derecho a enriquecerse a costillas del ciudadano que aun no ha encontrado lugar en alguna de esas vertientes de la burocracia, es que una discusión acerca del origen de la homosexualidad y el supuesto derecho universal al matrimonio no tiene lugar ni siquiera en parodia, porque para banalizar así un tema se necesita mucho tiempo libre y eso significaría que las cosas no están tan color de hormiga como ahorita. Sería divertido de tan aburrido pues.
PS: Si alguien vio la película "Gomorra", desmiéntame cuando digo que todos los caminos llevan a Nápoles, no necesariamente a Roma.
domingo, julio 19, 2009
Contreras
We spoke for over an hour and didn't say much.
Stories updated that are quite the same with a pile of time upon them.
Contradictions, self awareness and condescendence mixed in a non cute anymore combo.
We're almost in the same situation and miles away from resembling (or I want to beleive so).
I listened and nodded and giggled and resumed my last semester in three sentences closed by a weak but I'm all right.
He was telling me that his father has cancer and his mother diabetes and I reply that I just spoke to my mother and the only thing she has is a swollen ear. When I realized how clumsy and uncaring I'm being I say how sorry I am and try to change the subject with no success whatsoever. I've forgot what a bad listener my ex has always been.
He's currently living in Rosarito.
At this time, when everyone's abandoning Rosarito, he moves right there.
I've got to admit that I am as contreras as he is.
We said good bye with the promise to keep in touch. I said I'll visit soon. I hung up and I'm not sure if I'm happy or relief…
jueves, julio 16, 2009
Sombra
Hoy que fue cumpleaños de mi santísima madre y que llamé para felicitarla me pasaron al teléfono a una de mis primas, que yo confundí con otra que vive en Canadá, me costo trabajo reconocer su voz, así que improvisé preguntas triviales para adivinar pero fue inútil. No es fácil aplicar la estadística con una familia de más de 6 hijos cada clan, donde predomina el género femenino y cuyos acentos si acaso han variado gracias a los éxodos tan inn hoy en día.
El punto es que sería poco probable que me confundiera con la voz de mis amigos, esos que luego se convierten en la familia que escogemos por pura necedad de torcer el árbol genealógico de los quereres. Si me preguntaran ahorita los nombres completos y lugares de residencia de la mayoría de mis primos no sabría que decir, tendría que cantar una canción de Chava Flores pa'salir del paso. Lo curioso es que yo con mis parientes consanguíneos supe lo que era convertirte en adolescente o adulto mucho antes que me llegara a mi el momento, compartiendo vacaciones y duchas grupales que luego serian proscritas y de muchos de ellos si acaso recuerdo sus apodos: recuerdo el nombre de la prima que me enseñó a besar, del primo orgulloso por su lunar en la verga, del que se acercaba demasiado a mis hermanas sin que ellas se dieran por aludidas y del que cantaba como José José y a quien yo era alérgico por más que esa razón.
Pero llegó un momento en que el lazo afectivo se rompió por el rumbo dispar que tomaron nuestras vidas y empezó uno a construir otros lazos con gente que no compartía tus genes pero si intereses y experiencias que podían decirse en voz alta o que si debían callarse se hacía con una sonrisa o un guiño de ojo. La complicidad es algo que une más que cualquier otra cosa y llegar a ser cómplice de alguien puede ser fácil, pero el hecho de elegir te permite construir un universo propio, agregarle ramas al árbol y resguardarte a su sombra cuando los párpados te pesan o te cuesta dar un paso o simplemente todo se pone monocromático y húmedo.
lunes, julio 13, 2009
Woh!men
lunes, julio 06, 2009
Rojo rabioso
Si eso no me tumba es porque seguro estaré hecho de otro material, vengo de otro mundo y por eso siempre he sentido que no encajo del todo y que ni los zapatos me ahorman como deberían. Claro que luego me viene la idea de que muchos se sentirán igual de especiales, lo cual le quita a uno lo especial (filosofía Pixar), pero ni así me dan ganas de tirarme al río y lo que alguna vez sentí como instinto suicida en el metro me queda claro que fue simplemente vértigo.
Pero hay días -que no necesariamente son lluviosos o nublados- en que me invade la rabia, el descontento, la angustia y las ganas de hacer daño, de liberar ese instinto básico reprimido. Son esos mean reds que describía la Golightly al alter ego de La Capote (sí, con mayúsculas) y que no hay palmadita en la espalda o sonrisa furtiva que te ayude. Tienes que soportarlo como las mujeres soportan los cólicos pre-menstruales.
Yo, esos días procuro no ver a nadie y aplazo cualquier compromiso por importante que sea porque tomar una decisión bajo el influjo del rojo rabioso te puede llevar a la catástrofe y hay quienes de plano no están preparados para verte descender frente a sus ojos. Porque uno, tan ecuánime y zen y civilizado y sofisticado una vez que muestra el cobre no hay campaña que restituya la imagen que ha construído con un esfuerzo no por torpe menos admirable.
Esos días procura no ser un dependiente de fast food o cualquier caja de supermercado ineficiente porque mi piel de oveja es sólo el equivalente al vestido negro de Givenchy y el croissant con café hirviendo puede convertirse en mis manos en un arma de destrucción selectiva.
jueves, julio 02, 2009
El amor se basta solo
Al llegar a los apéndices -que luego me entero fueron citados por varios especialistas en psiquiatría como reales y no como la ficción que son- casi me empezaba a molestar por lo que interpreté como una innecesaria explicación científica de un comportamiento romántico llevado al límite, pero me reconcilié con el autor al darme cuenta que su intención era justamente lo opuesto. Partir de un supuesto argumento científico para redimir un personaje que logra integrar su mundo interior a aquel que le es dado, reconciliándolos para su propio bien y el de la literatura...
Retomo mi camino con esa sensación de vértigo al cerrar un libro que lleva días acompañándome y que será reemplazado por otro con cubierta más brillante, aún envuelto en celofán y tapizado con post its meta-narrativos.
*Mención especial a la cubierta más bella desde The Volcano Lover, de Su Majestad, La Sontag y Sueño Profundo de La Yoshimoto.
domingo, junio 28, 2009
Días de lluvia
We went to Valle de Bravo and Avandaro, which I imagined as a hippie sanctuary in the middle of a valley but it turned out to be quite the opposite: a beautiful place for bourgeois Mexicans and foreigners that used to make fun of the hippie thing right before it actually became a joke itself.
On Sunday I woke up late, just on time to laugh with Old Christine (one of my TV darlings) and had two greasy quesadillas for breakfast. There's nothing better to cheer you up than calories. I tried to make plans for the day, but it started raining before I got to any schedule so I decided to stay in pajamas and watch television all day.
By the time "Friends" ended I got hungry again. The rain stopped on time to go get a burger at the mall and maybe catch a movie. Not only the movie programming was poor but the mall was a nightmare of zombies with shopping bags and ice cream cones in their hands instead of bloody meat and brains.
At those moments you kind of understand those people that get into public places and shoots arbitrarily for no apparent reason. More than one time I wish I had a gun and enough rage to do the same to the lady with ugly hair style and expensive purse or the family guy with the T-shirt tucked under the sweatpants or the metro sexual guy wearing white shoes and a matching belt or the girl with ugly eyebrows and decorated nails matching her cell phone. Mine would be the opposite of mass murder. I'm unfamiliar to arbitrariness.
I get my burger to go. Buy the newspaper and walk to the park next home. Eating while reading about Honduras aborted coup d'état, economical recession, Iran, Israel and some other international crap. A bald guy approaches asking something regarding today's soccer game. I reply that I'm not interested in sports and the guy smiles and says good bye without acknowledging my rudeness. His beautiful little boy walks after him turning his head towards me, staring. I smile at him and he smiles back.
In my way home I stop at the coffee place and order mocha. The clerk asks me about the soccer game and I wonder what happened to the weather talk or the no talk at all…
Rainy days were made for silence.
viernes, junio 26, 2009
Man in the mirror
martes, junio 23, 2009
三島由紀夫
Cuando Él murió yo aún no nacía. La cabeza desprendida de su cuerpo fue la metáfora final de la lucha que su mente mantuvo por mucho tiempo contra sus impulsos eróticos. Yo, antes de leer aquel libro que compré a escondidas, ya había visto la imagen entre seductora y trágica de San Sebastián en la enciclopedia familiar. También empezaban a ejercer un poder hipnótico sobre mí esos vellos oscuros que se asomaban de las axilas de los adolescentes. Pero encontrar todo eso verbalizado de esa manera en un libro cuyo título parecía aludir más a un carnaval o un circo que al despertar a la vida de un adolescente mimado e hipersensible, fue como entrar a otra dimensión. No sólo el ver reflejadas mis propias experiencias sensoriales y enterarme que alguien allá afuera, en otro tiempo y otro lugar tan diferente al mío, sentía lo mismo que yo sino que en lugar de presentarlo como algo vergonzoso o terrible, era capaz de convertirlo en algo poético y conmovedor gracias a la escritura. Y cuando pienso en ese libro en su lengua original me imagino un lienzo blanco con pictogramas de tinta china como pequeños y hermosos personajes contando entre todos esa historia que es de Él pero mía a mi manera: con desiertos brillantes en lugar de cerezos nevados, con mi individualidad precoz buscándose un espacio propio entre el hacinamiento en lugar de la construcción de una voz interior que haga compañía entre esos espacios amplios y la tiranía adulta condenando todo lo ajeno a la soledad, explicándonos ambos el mundo que está sobre nosotros con el temor a no entenderlo lo suficientemente rápido, antes que nos aplastase.Men wear masks to make themselves beautiful. But unlike a woman's, a man's determination to become beautiful is always a desire for death... (Y. Mishima)
miércoles, junio 17, 2009
Jornada contra La Cursilería
El problema con la cursilería no son los encajes ni los floreros ni las crinolinas ni la mediacola ni el color rosa ni el lápiz decorado con plumas violetas ni los bolígrafos bicolores llenando el diario miado de una adolescente ni el ropón del bautizo ni la tanda húngara o el ramo lanzado ni el poema en verso ni la rosa blanca en junio como en enero para el amigo sincero que te da su mano manca. NO: esa es tan necesaria o cuando menos con el mismo derecho de existir que mi sarcasmo. Lo problemático viene cuando esa pereza mental disfrazada de lirismo se interpone entre la realidad y el discurso, entre los hechos y el análisis de los mismos, cuando entorpece la lectura de una realidad a veces ni tan compleja y muchas veces tan lapidaria que mucha gente siente la obligación de lanzarle ayes y odas como flores a un féretro terroso del que no queremos ver su interior y cuyo polvo que lo cubre es la metáfora de la negación sistematizada.
La cursilería es un virus mucho más peligroso que la influenza y contra eso no se ha inventado tapabocas. Y ni siquiera me atrevo a decir que el único retroviral existente sea el cinismo, que también se convierte en pandemia de tan improductivo y paralizante, sino el análisis con el apellido que quieran ponerle, pero empezando por ponerle el prefijo auto… da igual si le quieren poner un guión antes de pegarlo al sustantivo, que la gramática es lo de menos si la sintaxis interna nos permite darnos cuenta lo atrofiados que tenemos los verbos en la cabeza (únicos elementos de nuestro lenguaje que implican acción alguna).
Pero tampoco se trata de ponernos lingüísticos sino de dejar claro que si existe la cursilería en el lenguaje político, en las campañas, en la prensa y en las interlocuciones entre ciudadanos y gobiernos es por esa falta de autoanálisis, por dejar que nuestra manera de verbalizar las cosas nos indiquen lo que pensamos y no al revés, por apropiarnos de los diálogos de las telenovelas en lugar de exigir a sus autores que reflejen el nuestro, por decirnos tan sensibles al ver los niños famélicos del África colgados de una pantalla y poner la misma jeta con el conteo de infantes carbonizados en una guardería de un lugar -del que no voy a decir su nombre- que sólo gracias a la negligencia oficial y ciudadana es capaz de generar encabezados internacionales (hasta el NYT pues), por prostituir la lágrima al mejor espectáculo que pase frente a nosotros porque el dolor -señoras y señores- no se comprende ni se imagina ni se compara si no se quiere insultar a las verdaderas victimas, pero sobre todo no nos exime de la responsabilidad de haber elegido esos gobiernos y esos representantes hambreados de nuestro voto cada tres o seis años ni de permitirles todo lo que el fuero de nuestra indolencia les condona para luego hacer el numerito de la queja cansona y a destiempo, del lamento infecundo, dándole la espalda a la razón o viéndola feo porque no fue invitada a su propio velorio.
Dejémosle la cursilería al Siglo de Oro o a Pita, a Nervo o a la Cartland, incluso a las telenovelas o a Disney, o a Chabelo y el beso que le dio su maestra a la salida, o a Tatiana y el patio de su casa (de donde creo salio huyendo del marido), o a Paty Chapoy y su mafia chismosa, o a los obispos y la liturgia cristiana o de la que sea, pero no permitamos que nos nuble la razón, esa chingaderita que no necesita de flamas ni rosas para adornarse, que no se preocupa de modas ni de buen gusto o de si alguien se la tatúa en el brazo, pero que se sabe mientras más inoportuna, más valiosa.
viernes, junio 12, 2009
Confieso que he leído...
...y que fuí al concierto de Metallica.The Invention of Solitude (Paul Auster): Fuera de la trilogía de Nueva York y otros relatos que había leído de este autor norteamericano canónico, confieso que me había costado trabajo conectar con su visión melancólica con todo y que reconozco sus cualidades formales como precisión narrativa, sencillez y ritmo. Pero llegó un momento en que tuve que soltar uno de sus libros pues me irritó su cansona posición masculino-crepuscular (término tan de moda como mamón para referirse a la decadencia): -Esto es demasiado buga para mí; me dije a mimismo, en un ataque de heterofobia. Afortunadamente, años después me topé con ese bonche de libros que había comprado de Auster y tomé éste que me resultó un verdadero descubrimiento, sobre todo por la manera tan sensible y honesta que aborda el tema de la paternidad desde los dos nodos que lo conforman: el del padre y el del hijo. Dividida en dos partes, esta memoir se sirve de la historia bíblica de Jonás, el Pinocho original y el de Disney, así como de Freud y otros para, al tiempo de reflexionar sobre su historia personal, ilustrarnos sobre el proceso creativo y sus infinitos vericuetos. The Invention of Solitude es donde a partir de la muerte de su padre inicia una aventura por rastrear esos momentos en la vida de ese inmigrante judío que lo convirtieron en alguien tan fuera de este mundo, con un pié en la realidad y otro sumergido en un pantano, alguien que aprendió a esperar tan poco de la vida para no decepcionarse que fue incapaz de construir una relación profunda con nadie. The Book of Memory es el proceso de A. (alias del autor, duh) por construir un marco de referencia y un sentido alejado de lo superficial a su experiencia como padre de familia, tratando de evitar las trampas de la herencia y construyendo un lazo con su hijo como jamás pudo tenerlo él mismo con su progenitor. Atendiendo los últimos días de vida de su abuelo materno, A. se propone crear una guía anecdótica cifrada para que su hijo no tenga que escarbar de la nada en un futuro y evitarle la condena de adivinar en una fotografía rota y un album vacío la parte de su historia familiar que su abuela paterna trató de esconder, condenando a sus hijos a dividirse en partes iguales una culpa que no tenía nada de freudiana.
Nota sobre el concierto de Metallica: En los noventa me daba vergüencita confesar que me gustaba este grupo medio supremacista, pero pues con la edad uno va perdiendo la vergüenza al tiempo que la lozanía, por eso me sorprendió ver una considerable bandada de fans veinteañeros y adolescentes prematuramente trasnochados. Además caí en cuenta porqué este grupo tiene casi tantos detractores como fans: los metaleros de hueso colorado odian tanto la melodía como los colores primarios y los metálicos son tan buenos músicos que se permiten demasiadas cosas inaceptables para el género. Mención aparte es el tacazo de ojo y el perdón que se merecen aquellos entrados en años y en kilos por su romanticismo matalúrgico al cabecear frenéticamente y quitarse la camiseta para revivir su slam noventero que, de no ser por esas barrigas cerveceras, me habría sentido atrapado en una cápsula del tiempo al puro estilo Lost. El detallazo fue ese fan emergente que no dejaba de verme y tomarme fotos, fingiendo estar tomando a la multitud y que según mi acompañante, sólo le faltaba el valde y la franela para decirle "viene-viene" al amor que no se atreve a decir su nombre.
lunes, junio 08, 2009
Tiro de gracias
jueves, junio 04, 2009
Coitus Interruptus
miércoles, mayo 27, 2009
Misoginotauro Rex
Nosotros con el machismoNo pocas veces he sentido ganas de cachetear a una mujer. Hoy hubiera sido un buen día para ceder a mis instintos tres veces, con tres mujeres defendiendo su estatus de ciudadanas especiales, pues alguien les hizo creer un día que por tener útero eran merecedoras de un trato preferencial. Y no estoy hablando de mujeres golpeadas o negadas de sus derechos elementales como ciudadanos con A sino de mujeres clasemedieras aguerridas por su derecho a que uno les ceda el asiento en el transporte público, no porque uno quiera o reconozca su minusvalía al cargar con esa matriz que un dios malintencionado les dio, sino porque a ellas se les da la gana. No importa que uno haya procurado la estación menos congestionada, que incluso haya dejado pasar varias unidades para evitarse molestias. No, lo único que importa es que es una ofensa para el género que yo haya decidido seguir con mi lectura todo el trayecto y que la única vez que quise ceder mi lugar fue a cambio de un poco de silencio, el cual me fue negado con la misma elocuencia que mi trasero mostrara su convicción contestataria.
Ustedes al feminismo
y al final la historia termina en paz...
(Ricardo Arjona)
martes, mayo 26, 2009
The Boleyn's neck
Soñé que Ana Bolena tenía el cuello de Schwarzenegger y no sé si tendrá lógica, pero creo que ésta no es requisito del subconciente. En mi sueño, fue esa la razón por la que mandaron traer un ejecutor especial desde Francia, aunque de haber sido yo hubiera mandado traer uno de Japón (desventajas de que no existieran las películas de samurai en ese entonces). Y ya entrados en el chisme, en mi sueño la Bolena chingona era hermafrodita, una razón más para imputarle lo de bruja, y una manipuladora que haría palidecer a los Borgia enteros y a Catalina Creel juntos. Obvio Ana no podía parir, pero para ser madre sólo se necesita imaginación y recursos, la matriz resulta un accesorio tan prescindible como una diadema una vez que se llega al poder de uno de los reinos más poderosos del siglo ése que parió a la Elizabeth, amante de los encajes y las telarañas en el coño. Según mi teoría onírica, Mary era la surrogate mother, una mustia que no superó ser desplazada por un fenómeno de la naturaleza que llevaba su sangre (de ahí el mito de los seis dedos) y que se moría de celos por la relación incestuosa de su hermana con el menor George, quien no superó que lo casaran con una ajada señorita quedada de la nobleza. Su amor por Ana lo llevó a compartir su destino con gusto. Dicen que en el palacio aún se escuchan los murmullos y las risas de los hermanos jugando debajo de las sábanas y que sus cabezas rodando en el jardín donde los ejecutaron nunca perdieron esa mueca que horrorizaba a los demás llamada felicidad.
lunes, mayo 18, 2009
There is no I
And I am all for it Babe,
it's time we give something new a try
(Interpol)
sábado, mayo 02, 2009
Hasta los dientes
sábado, abril 25, 2009
Alerta bacterioilógica
Al doctor que me recibe sólo alcanzo a verle sus ojos verdes. El timbre de su voz mejora por el filtro de la tela en sus labios y sus manos escriben con avidez mis informes en una lap-top como vieja posona en cualquier Starbucks. Me pregunto si el tipo no estará chateando mientras yo me desnudo sintomatológicamente, contándole mis desarreglos bacteriológicos y mi osadía antibiótica. Me dice lo que ya intuía y me comento a mi mismo que si hubiera que morirse de alguna chingadera de moda, emergente o apantalla-secretarios-de-salud preferiría algo mucho mas glamoroso que un virus porcino. No me malinterpreten, queridos cerdos, me encanta el tocino y la pierna al horno que hace mi madre, pero morirse de algo que tenga que ver con granjas, chiqueros y sobrepeso voluntario (si es que eso existe) es inviable en momentos en que hay tantas opciones iconoclastas y cargadas de harto dramatismo como para desperdiciarlas en algo tan vulgar como una gripe.
Después del toqueteo de rigor y de presumir amígdalas y vibrato sostenido, paso al asalto en despoblado que es la caja y farmacia de cualquier hospital privado sin quitarme el cubrebocas, para no desentonar con el tono sombrío que se ha vuelto casi oficial y me cae el veinte que acabo de pagar el equivalente a un boleto de avión a cualquier destino nacional, pero me tumbo el rollo al imaginarme camino al aeropuerto, estornudando en plena sala mientras me rodea un bonche de personas en trajes amarillos y mascarillas apocalípticas, rociándome con una sustancia extraña y llevándome a rastras al mundo donde todo han sabido reducir a su esencia genómica menos el buen gusto.
Mientras me río impunemente de mi mal chiste se me abre el apetito, pero la idea de comprar alimentos en estas circunstancias tragicómicas me hace cambiar de opinión y conformarme con un par de quesadillas caseras con yogurt para beber en la comodidad de mi cuarto y acompañado de la programación televisiva que ya me sé de memoria y que tan llena está de enfermeras ninfómanas, doctores intelectualmente atarantados y cirujanas oligofrénicas que tan poco favor le hacen a la práctica médica…
domingo, abril 19, 2009
iMiss you already
domingo, marzo 29, 2009
No todo el rap es para reírse
En el Zócalo, unos minutos antes de "bajar el switch" por una hora, la poca gente convocada deambula como en romería, se atraviesan grupos de jóvenes cargando cartulinas con leyendas conmiserativas hacia el planeta, muy al estilo Caló ahora te lo dice, no todo el rap es para reírse (y ese verso tampoco?), con una caligrafía de kindergarten, muy en congruencia con su contenido (o ausencia del mismo). Se alcanzan a ver muchachos apuestos con camisetas moradas y el logo de yahoo impreso, que reparten tubitos de plástico con liquido fluorescente que los niños arrebatan como dulces en fiesta infantil, solo que aquí la piñata es el fotogénico globo terráqueo. Tomo una y me la cuelgo al chaleco justo cuando la cuenta regresiva comienza y me decepciono al ver que solo unas cuantas luces alrededor del lugar se apagan, no las suficientes como para no ver a aquellos que festejaban el triunfo de la selección sobre un equipo centroamericano cuyo país cuenta con menos habitantes que el estado mas pequeño de México.
No vale la pena mencionar la cantidad de energía derrochada durante esa hora bienintencionada para tomar fotos mal iluminadas o registrar reacciones con cámaras de video digital o mandar mensajes de texto para recomendarle a tu lista de contactos que apaguen la luz, pero jamás el teléfono celular (how rude!). Tampoco que las pilas de esos celulares se hacen con un material extraído en minas de África por niños famélicos cobrando un dólar la jornada diaria laboral... La verdad es inútil señalar esa clase de incongruencias en un país cuyo único partido ecologista gasta una ofensiva cantidad de dinero en spots televisivos y espectaculares tapizando camiones y marquesinas donde invita a la población a apoyar la instauración de la pena de muerte en México. Justo lo que necesitamos: si no está bien visto matar ballenas, creemos un sistema que elimine seres humanos y apacigüe nuestras ansias homicidas.